Hermanos y hermanas, María es la que dice SÍ a la vida, SÍ al servicio, SÍ a la entrega de sí misma en favor del otro; SÍ a ser cauce de la Buena Noticia de su Hijo Jesús. Oremos.

Que nuestra vida sea decir SÍ a la Vida

• Que la Iglesia sea cauce de la Vida de Jesús de Nazaret, reflejo de la vida mariana como disponibilidad, servicio, acogida, portadora de vida y Vida en abundancia.

Que nuestra vida sea decir SÍ a la Vida

• Que nuestras comunidades parroquiales y religiosas, sean espacios abiertos a cuantas personas necesitan un techo, una escucha, una mano tendida, un plato de comida, un sentirse alguien para alguien.

Que nuestra vida sea decir SÍ a la Vida

• Que nuestros hechos y actitudes sean trasparencia de la vida de Jesús de Nazaret, camino de vida, de salud, de reconciliación, de esperanza y fe en el ser humano.

Que nuestra vida sea decir SÍ a la Vida

• Que cuidemos de nuestras madres con cariño y agradecimiento, con especial atención y delicadeza y ternura hacía las madres mayores, enfermas, que viven la soledad no deseada.

Que nuestra vida sea decir SÍ a la Vida

En esta fiesta de María, celebramos con gozo el SÍ de María, que ella sea uno de nuestros referentes de vida en clave de servicio y entrega. Agradecemos la vida de Jesús de Nazaret.

Vicky Irigaray