Hermanos y hermanas, en esta noche santa, lo mismo que la noche de Pascua, queremos hacernos uno con toda la humanidad y ser anuncio de la Buena Noticia que se nos ha regalado en Jesús. Oremos.

Que nuestra alegría la conozca todo el mundo

• Que en la Iglesia seamos proclamación de otro mundo, que seamos fragilidad acogida junto a los frágiles de la tierra; que seamos referente de una esperanza que nos trasciende y nos unifica.

Que nuestra alegría la conozca todo el mundo

• Que nuestra alegría de esta noche llegue a todos los rincones de nuestros entornos, que seamos siempre motivo de confianza y alegría en medio de la vida cotidiana.

Que nuestra alegría la conozca todo el mundo

• Que todos nosotros y nosotras nos comprometamos definitivamente con el modo de ser y hacer de Jesús de Nazaret, que seamos siempre cauce de bien, de futuro, de posibilidad.

Que nuestra alegría la conozca todo el mundo

• Que seamos sembradores de Vida, de fragilidad aceptada y fecundada, de fraternidad universal, de amor que sostiene y consuela, de justicia y de paz.

Que nuestra alegría la conozca todo el mundo

Jesús de Nazaret, niño frágil que esta noche adoramos, bendecimos y agradecemos, que tu presencia entre nosotros nos conmueva por dentro y nos invite a ser próximo junto a los frágiles de este mundo.

Vicky Irigaray