JUAN 20, 1-9
Nuevo Testamento1 El primer día de la semana, por la mañana temprano, todavía en tinieblas, fue María Magdalena al sepulcro y vio la losa quitada. 2 Fue entonces corriendo a ver a Simón Pedro y también al otro discípulo, el predilecto de Jesús, y les dijo:
- Se han llevado al Señor del sepulcro y no sabemos dónde lo han puesto.
3 Salió entonces Pedro y también el otro discípulo y se dirigieron al sepulcro. 4 Corrían los dos juntos, pero el otro discípulo se adelantó, corriendo más de prisa que Pedro, y llegó primero al sepulcro. 5 Asomándose vio puestos los lienzos; sin embargo, no entró.
6 Llegó también Simón Pedro siguiéndolo, entró en el sepulcro y contempló los lienzos puestos, 7 y el sudario, que había cubierto su cabeza, no puesto con los lienzos, sino aparte, envolviendo determinado lugar. 8 Entonces, al fin, entró también el otro discípulo, el que había llegado primero al sepulcro, vio y creyó.
9 Es que aún no habían entendido aquel pasaje donde se dice que tenía que resucitar de la muerte.